Las comunidades que solo contaban con una escuela primaria tuvieron dificultad para proporcionar educación secundaria a sus hijos. Ante este hecho, los padres de familia buscaron la forma de gestionar una escuela secundaria y se organizaron a través de las autoridades pertinentes, tal es el caso de el C. Sebastián Martínez Pérez, Comisariado Ejidal de Santiago Oxtoc Toxhie, el C. Eleazar Juan Arias, Delegado Municipal de la Comunidad y el C. Alfonso de Jesús Juan, Presidente del Consejo de Vigilancia Ejidal. Hicieron la solicitud correspondiente al C. Presidente Municipal, el Prof. Arturo Osornio Sánchez; solicitud que fue autorizada y de inmediato se procedió a buscar el lugar idóneo para la construcción del plantel. Después de una serie de pláticas y reuniones se acordó que el paraje �La trampa� era el lugar más idóneo, sólo que había una limitante, el lugar era un campo de fútbol y había que negociarlo con los jugadores. Después de este paso se procedió a levantar las actas de donación, quedando delimitado de la siguiente forma.
Al Norte linda con el ejido de Toxhie, al Este con un terreno del señor Alfonso de Jesús Juan, al Sur con camino vecinal y al Oeste con el campo de fútbol.
Se colocó la primera piedra el día 2 de septiembre de 1985 y se terminó de construir el 20 de enero de 1987. Inicialmente se construyeron tres aulas, un laboratorio, dos baños, la cooperativa escolar y el pórtico. Fue inaugurada por las autoridades educativas y civiles el día 2 de febrero del mismo año.
La escuela fue construida en el Ejido de Toxhie hoy llamado Loma de Buenavista Ñado, Municipio de Aculco, México. Acuden a ella jóvenes de Toxhie, los Ailes, Ñado, Colonia de la Desviación de Aculco, La Concha, El Ermitaño, La Palma, Conejeras y de diferentes comunidades, municipios y estados.
Es una de las más importantes en la región y aunque hay otras escuelas telesecundarias cercanas, la preferencia por la nuestra es notable; aunque cabe mencionar que en 1993 bajó la matrícula debido a la separación de Toxhie, Conejeras y La palma.
La matrícula escolar está integrada por alumnos de descendencia otomí y mestiza, pero esto no ha sido una limitante para que se de la buena convivencia aunque sus orígenes y formas de vida sean diferentes. De igual forma existen diferencias religiosas que son respetadas pero el alumno sabe que debe cantar el himno nacional no importa a qué doctrina religiosa pertenezca.